El seguimiento, los cuidados y cualquier tipo de prescripción médica que necesiten tus ojos, son tan importantes para los resultados como el procedimiento mismo que tuviste. Lo ideal es que estos cuidados te los indique tu propio doctor.
Es necesario asistir a controles periódicos para tener la seguridad de que tus ojos se están recuperando de acuerdo a lo esperado, para determinar que no haya ninguna infección y para evaluar el progreso de tu visión.
Al día siguiente de tu cirugía, tendrás la primera revisión por parte de los doctores, quienes te formularán gotas antibióticas para aplicar durante la primera semana y otras gotas para aliviar la sensación de resequedad normal durante los primeros meses.